Tomemos en cuenta que las vacaciones rompen la rutina acostumbrada y por lo tanto tus pequeños seguramente habrán desajustado todos sus hábitos cotidianos. Al preparar el regreso a clases, todos en casa pasaran por un pequeño proceso de readaptación a la normalidad escolar. Esto implica reconectar con las responsabilidades y prepararlos para el cambio. Sigue leyendo, y sabrás cómo lograrlo sin estrés.
- Haz que tus niños participen en la organización: para que la planeación resulte algo que los motive y no que los frustre, es importante que los involucres con alegría y que te vean entusiasmada.
- Recicla útiles escolares que puedan seguir ocupando: es una acción que te representará un gran ahorro de dinero, te ayuda a tener claridad en las cosas que necesitas adquirir y así no comprarás material que no necesitan.
- Que tus hijos decoren el espacio que designarán para sus tareas: ellos podrán sentirlo como una actividad creativa y al mismo tiempo es algo que te ayudará a tenerlos entretenidos e ilusionados con la escuela. Si ellos se sienten en un lugar confortable, iluminado y decorado con su propio toque, rendirán mucho mejor al momento de hacer sus tareas.
- Compra el material escolar en compañía de tus niños y en una tienda física: no te compliques y hazlo junto con ellos al menos con dos o tres semanas de anticipación y de preferencia en una tienda física ya que si lo haces en línea, tus hijos no tendrán oportunidad de convivir de cerca con todos los colores y la variedad de material que necesitan elegir y ver para entusiasmarse de cerca.
- Necesitan planear una agenda de tareas que tenga recesos: de esta forma sabrá que tiene tiempo para sí mismo y no se sentirá abrumado por las obligaciones escolares.
- Planifica el uso de transporte y verifica las rutas de acceso: Es recomendable llegar a tiempo y con calma para que tus pequeños no asocien el primer día de clases con caos.
- Se puntual al recoger a tus hijos a la salida de colegio: esta forma sabrá que al salir del colegio estarás ahí esperándolo y no se sumará otro punto de estrés al tener que esperarte o angustiarse porque no llegas.
