Desde que la guerra en Ucrania comenzó han sido incontables las acciones lamentables que han ocurrido, entre ellas las víctimas, las personas que han huido y otras que se han quedado a defender el país, dentro de todo Dios no ha faltado y el siguiente testimonio es una prueba de ello.
La ciudad de Bucha fue una de las más afectadas por la invasión rusa, debido a la cantidad de cuerpos abandonados en sus calles, fosas comunes en los patios de las casas y gente aterrorizada por el ejército, cuando abandonaron el lugar muchos dicen que fue un milagro de Dios.
Aun después de la retirada rusa del lugar hace cuatro meses, los cuerpos siguen apareciendo en Kiev, y en Bucha acaban de encontrar otros más.
Y aunque fue un tiempo difícil para todos, un grupo de más de 100 personas logró sobrevivir a los ataques mientras se escondían en el sótano de una iglesia, todos ellos eran la congregación y estaban con su pastor, se contabilizaron unos 167 cristianos dentro del espacio.
Ellos testifican que recibieron liberación de Dios al permanecer por días encerrados en el lugar, en donde adoraban a Dios, oraban, leían Biblia hasta que 4 soldados rusos los descubrieron y otros 15 esperaban afuera del lugar.
Durante varios días, los soldados estuvieron dentro de la iglesia y bajaban hasta el sótano a intimidar constantemente a los cristianos pero sin hacerles daño.
Luego de que el ejército ucraniano expulsara a las tropas rusas, el pastor Anohin se reunió con la agencia de seguridad de Ucrania y testificó que él y su iglesia habían sobrevivido a los acosos militares y que habían estado en grave peligro de muerte, pero aun así Dios mostró su misericordia haciendo que uno de los soldados más fuertes pudiera mostrar una faceta totalmente opuesta a lo que se conoce de él.
