Cuando hacemos un balance personal de nuestra economía descubrimos aciertos y errores, los cuales nos ayudan a mantener hábitos correctos en cuanto a la planificación y la toma de las mejores decisiones financieras. Motivadores en el área financiera consideran que sólo realizando un balance personal, incluyendo nuestros gastos e identificando las medidas que más resultados nos ofrecieron, podremos valorar mejor nuestras finanzas en el presente y el futuro.
Para hacer nuestro balance personal lo primero es revisar nuestra situación económica actual:
1. Revisar si nuestras finanzas están en orden, controlar los presupuestos, conocer los gastos, e identificar los objetivos a corto, mediano y largo plazo para nuestras finanzas.
2. Revisar los movimientos de dinero, claves, donde recibimos o gastamos el dinero que no esperábamos. Reflexionar sobre cuestiones que no tienen que ver estrictamente con las finanzas, le ayudará a pensar cómo repercute la economía en su vida y viceversa.
Cualquiera que sea nuestro balance personal, lo importante es reconocer que todos los escenarios tienen un plan de acción posible y que con cambios adecuados podemos mejorar nuestra situación. Reconocer nuestro mejor escenario le ayudará a proyectar y organizar las finanzas personales de cara al futuro.
