Liz McEntee, con 24 años de edad, es una estudiante del último semestre de enfermería en la Escuela de Enfermería Watts en Durham; trabajando simultáneamente como asistente de enfermería. Cuando tenía 17 años, quiso unirse al registro Be the Match después de enterarse de la batalla contra el cáncer de su vecino de al lado. “Tenía un vecino que tenía leucemia y estaba buscando un donante”, dijo. “Necesitaba un trasplante de células madre. Estaba muy enfermo y luchaba por encontrar uno”. Ese vecino, se benefició de una campaña de donación de trasplante de médula ósea de 2015 que lo ayudó a encontrar no una, sino dos coincidencias que restauraron su salud. Demasiado joven para donar a su campaña, cuando McEntee cumplió 21 años, ordenó un kit de prueba de hisopo por correo.
Unos años más tarde y para su sorpresa, recibió una llamada de Be The Match, la cual ignoró por creer que era spam. Estaba escéptica cuando, aproximadamente un minuto después, apareció un mensaje de texto en su teléfono que decía: “¡Hola, Liz! Habla Abby de Be The Match, el registro nacional de médula ósea. Has encontrado una coincidencia con un paciente. Por favor, llámame”. Lo antes posible”. “De hecho, mi primer pensamiento, y ahora me río de esto, fue: ‘Me van a pedir que haga un depósito y nunca más volveré a saber de estas personas’, dijo. “¡Así de improbable parecía esto!” Finalmente, después de leer un correo electrónico de confirmación de Be The Match y hablar con un representante, se preparó para su día de donación.
Liz no estaba nerviosa por el proceso de donación. Ella había estado trabajando con pacientes, administrando agujas, extrayendo sangre y viendo procedimientos durante el tiempo que pasó en la escuela de enfermería. La primera persona a la que recuerda haberle dicho fuera de su familia fue a su profesor principal, por correo electrónico. Fueron un gran apoyo y se ofrecieron a dejarla faltar a clase si era necesario. Su empleador en ese momento también estaba dispuesto a retrasar su fecha de inicio para hacer posible la donación. La mamá de Liz la acompañó a un hospital en Washington DC el día de la donación, donde dijo que el proceso transcurrió sin problemas. Regresó a clases 24 horas después del trasplante. Mientras se recuperaba dijo que se sentía completamente bien y no tenía problemas ni complicaciones. Pero ella tenía preguntas.
McEntee dijo que registrarse cambiará su vida y la de la persona que se beneficia de su regalo de vida. Puedes obtener información sobre Be The Match e inscribirte aquí.
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