“Durante los últimos 11 años, la Universidad Cristiana de Arizona y el Distrito Escolar Primario de Washington han mantenido una asociación mutuamente beneficiosa en la que los estudiantes del programa de educación primaria de la universidad impartieron clases y acompañaron a los maestros del distrito escolar”, el ADF ha explicado los problemas subyacentes a la debate. El bufete de abogados continuó: “Sin embargo, el distrito escolar decidió que ya no quería estar asociado con ACU debido a las creencias religiosas de la universidad sobre el matrimonio bíblico y la sexualidad, poniendo fin a la asociación sin citar ninguna queja o problema relacionado con un estudiante o ex alumno de la UCA”.
ACU demandó y el distrito escolar llegó a un acuerdo y volvió a aplicar el acuerdo de enseñanza a los estudiantes con ACU. Ryan Tucker, un abogado de Alliance Defending Freedom, se sentó con Faithwire de CBN para discutir el complejo caso y por qué cree que la reciente victoria de ACU podría enviar un mensaje poderoso. Tucker, quien calificó el incidente como un ejemplo de una “junta escolar que se volvió loca”, cree que la naturaleza pública de las declaraciones de los miembros de la junta fue bastante sorprendente. “Cuando un miembro de la junta escolar dice: ‘No me siento seguro con alguien porque es cristiano y no creo que deba tener a sus estudiantes, esos cristianos, en nuestras escuelas primarias’, creo que es impactante y fue inquietante verlo, dijo Tucker, “y estamos muy agradecidos de haber podido corregir el error que claramente ocurrió aquí”.
Mira a Tucker explicar la victoria y el mensaje que cree que envía:
Tucker dijo que ACU terminó con un mejor contrato que el que tenía la universidad anteriormente: un acuerdo de cinco años que fortalece la relación entre la institución y el distrito. “Es muy beneficioso, no solo para esta universidad, sino también para los propios estudiantes del distrito”, dijo. “Había una verdadera desconexión entre… las bases del distrito que, durante años, habían estado contratando… estos estudiantes y la misma junta que tenía una agenda, claramente… una vendetta, por así decirlo, contra la universidad”.
Tucker dijo que espera que la conclusión del caso envíe un mensaje a los miembros de la junta escolar y otros funcionarios gubernamentales en lo que respecta a la Primera Enmienda y la libertad religiosa. “No puedes tomar las creencias de alguien y ridiculizarlo abiertamente y someterlo a pura discriminación religiosa”, dijo. “De lo contrario, se enfrentará a una demanda como esta”. Tucker continuó: “Creo que envía un mensaje serio de que debes tratar a las personas con respeto”. El abogado también animó a los creyentes a ponerse de pie y defender sus derechos.
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