Durante la etapa de embarazo, como es sabido, las mujeres se someten a cambios no solo físicos, sino también emocionales y psicológicos; algunas mujeres dicen “necesitar una dosis sana de realidad” que no les cause pánico para afrontar esa etapa, aunque en realidad lo más importante es saber reconocer que se enfrentan a una serie de cambios en el cuerpo y en la mente que requieren su total atención y autocuidado. No sólo en lo referido a la salud física sino mental también, durante la etapa de embarazo la mujer es proclive a cambios podrían desequilibrar el estado emocional, afectar la autoimagen y el autoconcepto, así que fortalecer la autoestima durante el embarazo, redundara en fortalezas físicas y psicológicas, a nivel personal.
Las futuras madres, deberán disfrutar de cada etapa del embarazo sin que ello represente una carga exagerada, sin pretender ser la futura madre perfecta, sin obsesiones con el tema, aprendiendo poco a poco desde las experiencias y la intuición, a su ritmo y a su tiempo hasta quizás sin querer seguir “todo al pie de la letra” ya que eso podría agobiarles más y conducirles a un estado de tensión innecesaria. Reconocer los altibajos emocionales, sin sentirse culpable, aceptando los cambios del cuerpo tal como se presentan, sin angustiarse por el peso, por las estrías o por los desajustes naturales, enfocarse en los cuidados para la madre y el bebé, ese pequeñito que crece desde su interior, hará que disminuya la tensión y fortalecerá su autoestima.
